miércoles, 14 de septiembre de 2011

Invasor arrepentido

Asombroso discurso de un veterano.
Como el subtitulado corre muy rápido, debajo pueden leerlo con detenimiento.


http://www.youtube.com/watch?v=9kWU-JHetMM

Intenté sentir orgullo por mi servicio, pero solo puedo sentir vergüenza.
El racismo ya no podía enmascarar la realidad de la ocupación por más Tiempo. Eran personas, eran seres humanos.
Desde entonces me plaga la culpa, puede que vea a un hombre mayor, como el que no podía caminar y lo rodamos sobre una camilla para que la policía Iraquí se lo llevara.
Siento culpabilidad cada vez que veo una madre con sus hijos, como la que sollozaba histéricamente, gritándonos que éramos peores que Saddam, mientras la obligábamos a salir de su casa.
Siento culpabilidad cada vez que veo a una niña joven como la que agarré por el brazo y arrastré hacia la calle.
Se nos dijo que luchábamos contra terroristas. El verdadero terrorista era yo, y el verdadero terrorismo era esta ocupación.
El racismo dentro de lo militar ha sido, durante largo tiempo, una herramienta para justificar la destrucción y ocupación de otro país.
Durante mucho tiempo se han usado para justificar las matanzas, la subyugación y torturas de otras gentes.
El racismo es un arma vital empleada por este gobierno.
Es un arma mas importante que un rifle, que un tanque, que un bombardero o que un barco acorazado, es mas destructiva que el proyectil de artillería o un rompe-bunker o un misil Tomahawk.
Mientras que esas armas son creadas y de propiedad de este gobierno, son inofensivas, mientras que haya personas que se nieguen a usarlas. Aquellos que nos envían a la guerra no tienen que apretar el gatillo o tirar una ronda de morteros, no tienen que luchar en la guerra, solo tienen que vender la guerra. Necesitan un publico dispuesto a enviar y a poner a sus soldados en peligro, necesitan a soldados dispuestos a matar y a ser matados sin cuestionarlo, pueden despilfarrar millones en una sola bomba, pero esa bomba solo se convierte en un arma cuando los rangos militares están dispuestos a seguir ordenes para usarla.
Pueden enviar al ultimo soldado a cualquier parte del mundo, pero solo habrá guerra si los soldados están dispuestos a luchar. Y la clase dominante, los billonarios que obtienen beneficio del sufrimiento humano solo se preocupan en expandir su riqueza, en controlar la economía mundial, conprendan que su poder solo yace en su hablilidad para convencernos de que la guerra, la opresión y la explotación es por nuestro interes. Ellos entienden que si riqueza depende de su habilidad en convencer a la clase obrera a que mueran para controlar el mercado de otro país y de convencernos a que matemos o muramos se basa en su habilidad de hacernos pensar que, de alguna forma, somos superiores.
Soldados, marineros, marines, aviadores, no tienen nada que ganar con esta ocupación.
La gran mayoría de la gente que está viviendo en los EE.UU. no tiene nada que ganar con esta ocupación.
De hecho, no solo que no tenemos nada que ganar, sino que incluso sufrimos más debido a ella. Perdemos miembros y damos nuestras vidas de forma traumática. Nuestras familias deben contemplar los féretros abanderados, siendo bajados a la tierra.
Millones de personas en ente país, sin asistencia médica, sin trabajo, sin acceso a la educación, debemos mirar como este gobierno derrocha 450 millones de dólares diarios en esta ocupación.
(Sigue, pero creo que es suficiente).


¿Cuantos todavía continúan creyendo que los terroristas son los que se defienden del invasor?
¿Cuantos olvidaron la MENTIRA de las armas de destrucción masiva?
¿Cuando terminaremos de despertar?

4 comentarios:

Moscón dijo...

Sin palabras.Exelente hallazgo.

Luis Quijote dijo...

A veces se encuentra.
Generalmente cuando no es lo que se estaba buscando ¿no?
Jajaja.

Ester Lina dijo...

La industria norteamericana de armamentos practica la lucha contra el terrorismo vendiendo armas a gobiernos terroristas, cuya única relación con los derechos humanos consiste en que hacen todo lo posible por aniquilarlos. Eduardo Galeano

Luis Quijote dijo...

Ciertamente, Ester Lina.
¿Como dicen en Yanquilandia?
¡Business is business! ¿No?
(Negocio es negocio).